El temporal de Donostia esta dejando huella en su historia
Se confirman los peores pronósticos y Donostia ha sufrido esta pasada noche el peor temporal de los últimos años. El mar ha azotado con fuerza la costa guipuzcoana con olas que han superado los siete metros de altura en la costa.
Lo peor ha llegado a las seis de la mañana con la pleamar que venía acompañada de mareas vivas. La capital guipuzcona se ha llevado la peor parte y la alerta roja por olas decretada para esta madrugada ha obligado a cerrar total o parcialmente los puentes del Kursaal, Mundaiz y María Cristina. El de Santa Catalina ha podido abrirse a primera hora de la mañana en los dos sentidos para vehículos y peatones mientras los operarios realizaban las tareas de limpieza. El puente de Mundaiz también ha abierto al mediodía uno de sus carriles. Como puede verse en el vídeo, el mar se ha llevado parte de la barandilla en este puente y en el de María Cristina, frente a la estación del Norte.
Según avanza el día la ciudad va haciendo balance de los daños, que son muchos. Las imágenes a lo largo de la línea costera donostiarra son desoladoras. Barandillas rotas, piedras enormes repartidas por toda la ciudad, moviliario urbano destrozado. Los daños son cuantiosos y a la ciudad le costará recuperarse. El mejor dato, que no ha habido que lamentar heridos.
El Ayuntamiento de Donostia ha desalojado un bajo de la calle Soraluze y otro de la calle San Juan por entrada de agua y ha ofrecido alojamiento a las personas que viven en ellas. El agua ha entrado en la Parte Vieja donostiarra. Calle Aldarmar, 31 de Agosto, Soraluze... todas han visto cómo el agua entraba sin detenerse y ha llegado a alcanzar un metro durante la noche. En la calle 31 de Agosto alrededor de 600 personas permancen sin luz. Las olas han llegado hasta los jardines de Alderdi Eder y los bomberos de Donostia así como vecinos y trabajadores se ocupan de achicar agua de varios locales en la Parte Vieja donostiarra.
